CÉSAR RODRÍGUEZ
César Rodríguez es un fotógrafo basado en Xalisco, México. Sus fotografías se centran en personas y sus historias sobre migración, derechos humanos y cambio climático. Su trabajo ha sido publicado en: Time Magazine, The Washington Post Magazine, National Geographic, Der Spiegel, The New York Times, El País Semanal, El País, Le Monde, Bloomberg, The Guardian, The Washington Post, entre otros.
Cesar ha dirigido y producido 4 cortometrajes. En el 2022 realizo su primer fotolibro llamado Montaña Roja que fue elegido como uno de los 10 mejores fotolibros recomendados por el MoMa, Nueva York y como finalista del Paris Photo Aperture Book Prize 2023. Ahora presentando en Retina su más reciente fotolibro Hoja Dorada, realizado este 2024 el cual fue finalista de Arles, Les Rencontres de la fotografía 2024, Premio Libro de Autor.
¿Qué te inspiró a documentar la vida de los trabajadores tabacaleros en "Hoja Dorada"?
CR: Para decirte la verdad, fue por casualidad, yo había pasado por esos campos muchas veces pero nunca me había fijado realmente lo que pasaba ahí. Un día decidí, por curiosidad, adentrarme en los campos sin un fin ni objetivo, simplemente para conocer.
Yo aún no había realizado ningún proyecto de fotografía y mucho menos uno de largo aliento, tampoco sabía bien cómo hacer uno.
¿Cómo te enteraste por primera vez de las historias y de las condiciones del pueblo Wixaritari?
Una vez que empecé a caminar los campos, porque así fue cómo hice el proyecto, dejaba mi carro en algún pueblo cerca y caminaba todo el dia hasta la noche buscando familias trabajadoras, me di cuenta de la situación en la que vivían y trabajaban estas familias. Familias enteras: niños, jóvenes, adultos, gente de la tercera edad, mujeres embarazadas, todos trabajaban en estos campos.
Me di cuenta de cómo era para las familias trabajar y vivir en estas plantaciones de tabaco. Trabajaban desde el amanecer hasta la madrugada del siguiente día y así sin parar por 4 ó 6 meses. Para ellos venir a trabajar era una forma de sobrevivir, si no trabajaban así de duro no podrán tener algo de dinero para alimentarse y vestirse el resto del año.
¿Puedes describir el proceso y los desafíos que enfrentaste al capturar la vida cotidiana de las familias wixaritari en los campos de tabaco?
El desafío más grande que tuve fue el darme cuenta que yo tenía un punto de vista forastero, desde una forma de vida diferente y darme cuenta que mis tradiciones y lo que yo creía era mejor para ellos pues simplemente no lo era.
Las familias bajan de la sierra para trabajar, para tener un poco de dinero para poder comer durante y después de su trabajo entonces para ellos, todos tienen que trabajar, si sus niños no trabajan, la familia no ganará lo suficiente para que todos coman, para que todos se puedan vestir, ¿entonces ahí te preguntas, está bien o mal? ¿Para quién está bien o mal? Y son temas y preguntas muy complejas que yo creía, desde mi punto de vista de alguien foráneo, eran fáciles de contestar, siendo todo lo contrario.
¿Hay alguna imagen en particular que te haya llamado la atención por ser especialmente poderosa o reveladora?
Hay un par de fotos de un niño que tiene su piel herida debido a infecciones de la piel no tratadas y que se complicaron. Es una imagen muy fuerte pero creo que es necesaria para mostrar que no hay ni servicios médicos ni protección para los trabajadores ni un seguimiento adecuado para estos casos. Trate de mostrarla pero respetando la identidad del niño.
¿Cómo crees que tu fotografía puede contribuir a crear conciencia sobre las condiciones de vida y de trabajo de estos trabajadores? ¿Qué impacto esperas que tenga tu trabajo en la audiencia?
Creo que es difícil pero yo estoy convencido de que pueden pasar cambios a favor de los trabajadores. Algunas empresas de tabaco me contaron después de la publicación de este reportaje y me comentaron al siguiente año que la paga había subido, no sé si fue o no por las fotos pero así paso. Y he seguido en contacto con varios trabajadores y me han comentado que los salarios subieron durante dos o tres años y que algunos patrones ya les dan agua, algunas tiendas de campaña y algo de comida.